sábado, 26 de septiembre de 2015

La creatividad no reemplaza nada sino que transforma y anticipa lo que sorprendentemente ocurrirá.



¿Será cierto que la creatividad necesita 
de la improvisación como un elemento
 indispensable de la inspiración?

El proceso de improvisar alimenta desde el pensamiento lateral una idea rectora, la fortalece y la nutre. Una idea lleva a otra y otra y así maduran los proyectos.  
Muchas veces esas ideas que fortalecen a la idea rectora son tan sólidas y poderosas que dejan de fortalecer a la idea principal  para transformarse en otra idea rectora.  
El camino se habilita a partir del trabajo y fluye naturalmente, como “llamando” a seguir creando y fijando conceptos.

¿Y cómo se fijan esos conceptos?   Volvamos al ejemplo del libro: Imagine que Ud.   está concentrado leyendo  un libro que le interesa. Llega al final de una hoja, mientras la da vuelta, aprovecha ese instante en el que la hoja se desplaza para recordar lo leído mientras mira al infinito o por la ventana. Ese  instante, esa pausa  exacta en el momento justo es el que el cerebro necesita para fijar  el concepto.  

La curiosidad va a pedir más. 

Entonces uno baja la mirada y se concentra nuevamente  en la lectura desde una nueva perspectiva: la de haber   incorporado y fijado conocimiento. Luego la magia de su cerebro hará las sinapsis necesarias para que esa idea se complemente con otras y el proceso se nutre y reedita en nuevas ideas laterales . Ese es el proceso creativo en su estado más puro. Eso es aprender.

Dos ejemplos prácticos: En los grupos de trabajo de las organizaciones esta fijación de conceptos, este "aprender"  se fortalece a partir de la discusión  organizada y metódica. 

Asimismo,   para el artista el proceso de sinapsis se habilita cuando el pintor se aleja de su obra para observarla en un todo. O el escritor repasa lo escrito.



domingo, 20 de septiembre de 2015

GENTE TÓXICA DENTRO O FUERA DE LAS ORGANIZACIONES




 La acción es el enemigo del miedo. 
frente al miedo y a la inmovilidad 
 el cambio de actitud tiene que ser la acción.


A veces los “accidentes” que nos presenta la vida se materializan en personas, en jefes, en compañeros de trabajo, en vecinos, en profesores  desagradables, irritantes, pedantes, altivos altaneros y negativos con los cuales sí o sí debemos interactuar. En definitiva: gente tóxica.

 ¿Están presentes en nuestra vida con un propósito?  

Seguramente, para  desafiar  nuestra creatividad y sacarnos de nuestros espacios de confort. Son personas, que para bien o para mal,   vibran en una frecuencia muy distinta a la nuestra. No es mejor ni peor, es distinta y evidentemente algo tenemos que aprender de ellos.

¿Es necesario “hacerse amigo” ?  Como necesario no lo es, pero bien podemos pensar en dejar de considerarlo un enemigo para transformarlo en adversario cuyas opiniones uno respeta.

La colaboración puede ser una forma de sumarlo. Pensá en un proyecto de trabajo en el que necesites alguien que aporte una visión extrema de las cosas o una  actividad deportiva o un juego, y sumalo. La colaboración siempre suma y arroja resultados positivos.  

Intreractuar con gente tóxica  puede servir hasta de ejemplo como una personalidad a la que no quisieras parecerte. Te va a permitir ser consciente de los cambios que te conviene llevar a cabo en tu trato diario.

Pensá que siempre hay distintas maneras de encarar el mismo desafío y no sos dueño de la única verdad.

Por ejemplo, imaginá un grupo de actores que improvisan una obra de teatro en la calle . Es una forma de representar la obra, libremente, sin luces, sin más escenario que la imaginación de actores y espectadores. Por otro lado imaginá   esos mismos actores siguiendo un libreto en un teatro con luces, escenografía.  Más allá del entorno y los condicionamientos,   todos contamos con otros para hacer las cosas.

Los grupos humanos de organizaciones pueden conformar una sociedad cuyos latidos individuales devienen grupales  que  crean y recrean  ámbitos de creatividad. 

Un taller repleto de pintores es una comunidad de trabajo creativo alineados en la pintura y se oyen los ruidos, perfumes y sentidos propios de ese ámbito y no de otro.


Los grupos humanos productivos  que llevan a cabo un trabajo metódico e inteligente en un ámbito de paciencia y temperancia, estimulan el talento.

Y no es necesario permitir que vulneren tus límites. Si éste es tu espacio y éste es tu lugar, no permitas que ingresen quienes no van a sumar en tu vida. Depende de uno. 


domingo, 6 de septiembre de 2015

LA VENTAJA DE LOS OBSTÁCULOS



LA IMPROVISACIÓN DE LOS  “OBSTÁCULOS”


Los obstáculos son  oportunidades 
para ver los objetivos desde otra óptica,
 algo así como una nueva inspiración.


Las trabas o los problemas están presentes en nuestras vidas personales y profesionales para solucionarlos y no para negarlos. Otra forma de verlo es: asumir para corregir. 

Podrán ser hechos ocasionales, pero existen y en la medida que nuestra vida  devenga más y más creativa,  podremos considerarlos como oportunidades imprevistas de romper los paradigmas que nos encierran. ¿Acaso no  experimentamos estos “accidentes” a diario? Imagine un piloto de avión al que se le “planta” un motor mientras está a toda potencia  intentando  despegar, o un sonidista cuyos equipos de audio fallan en el momento que la orquesta irrumpe justo cuando el  telón se alza… 

Y sí,  esas cosas ocurren. La combinación de  creatividad aplicada a la experiencia (recuerde la imagen de los  conjuntos  que se complementan) aportara seguramente una solución exitosa. 

Di una charla a un grupo de personas en una empresa. Cuando llegué me enteré que no había cañón para conectar mi PC  y poder guiar la charla a partir de las imágenes. Debía salir de mis espacios de confort y  comencé – como siempre- con una historia  al mismo tiempo que   me acercaba al  único rotafolio que había en la sala. Por suerte había elementos para escribir  de distintos colores y mientras hablaba comencé a dibujar.  Para no perder el buen orden, sobre la primer hoja  escribí  mi nombre y el título de la charla, luego seguí escribiendo  gráficos  o textos resaltados  de  aquellas  transparencias que eran más importantes. En la medida que dibujaba iba arrancando las hojas  y las iba  colocando   en la pared siguiendo la secuencia de la presentación.

Fue distinto que seguirla utilizando la PC por ddos motivos:
  • Porque en todo momento veíamos todos los dibujos  
  • Porque me pude mover por la habitación libremente. 
Esto llevó a que el movimiento de mi cuerpo más el contenido, más los dibujos capturaran  la atención. 

Creatividad más experiencia siempre  están  presente cuando los habilitamos.
Imaginen un guitarrista al que se le corta una cuerda durante un concierto….



Hace muchos años, durante la performance de una opera famosa en un escenario internacional, un tenor muy conocido estaba cantando ya la escena final.  Estaba de pie, totalmente solo en el escenario  ofreciendo a la audiencia lo mejor de su voz entonando  un aria espectacular. Mientras cantaba, debía ingresar - lentamente por el extremo izquierdo del escenario - un cisne blanco de utilería  al cual se debía montar el  protagonista y terminar  el aria final mientras se alejaba montado elegantemente.

 El cisne efectivamente ingresó por el lado izquierdo,  pero no se detuvo  para que el cantante se subiera,  y  siguió viaje hasta salir por el extremo derecho. El tenor dejó de cantar, se hizo un silencio mortal y ante el estupor de la gente,  colocando sus brazos en forma de jarro  dijo en tono de broma dirigiéndose al auditorio: ¿Alguien sabe a qué hora pasa el próximo cisne ?  

Como resultado, la gente rió y aplaudió mientras el cisne de utilería entró rodando suavemente de nuevo, esta vez  en reversa, lo que arrancó más risas. El tenor  agradeció, se concentró, se sentó en el cisne  arrancó el aria nuevamente, todo funcionó como estaba previsto, el “gran finale” fue histórico y obviamente fue ovacionado.  


Esta historia verídica demuestra que la experiencia sumada a la creatividad puede arrojar resultados más que exitosos, inesperados e  inolvidables.

Horacio Bellotti



H